La Mirada
01/12/2010
Hola a tod@s:
Este mes se despide nuestro gran amigo “Simelmo Marno” con su alter ego “Fernández” y quiero compartir mi agradecimiento por su colaboración, por su ayuda y por su amistad. Han sido muchos meses de apoyo, ideas y reflexiones profundas que nos han permitido mejorar y disfrutar del camino. Muchas gracias por todo y hasta siempre amigo.
Me consta que existen psicoterapeutas invidentes que potenciarán su carencia visual con un mayor desarrollo de otras habilidades y sentidos. Salvada esta excepción quiero hablaros de LA MIRADA en psicoterapia, y no me refiero al sentido de la vista, que sería muchísimo más amplio.
La mirada de la persona que tenemos enfrente nos dice muchas más cosas de las que pensamos a priori. Está facilitando movimientos energéticos que nunca hasta ahora habíamos tenido en cuenta. Conecta entre sí núcleos cerebrales de una forma nueva no identificada hasta la fecha. Propicia el reprocesamiento cerebral para que nuestro cuerpo se cure de los traumas vividos en el pasado.
Hace unos días, realizamos en el Instituto Galene los dos niveles de formación en Brainspotting (BSP), la técnica psicoterapéutica más profunda y efectiva que conozco para el reprocesamiento cerebral en psicoterapia. David Grand, su creador, estuvo enseñándonos a utilizar el BSP, hablándonos de su historia, principios filosóficos, anécdotas y practicando y supervisando el manejo del BSP en terapia. El lema que resume la técnica es el siguiente: ““Where we look affects how we feel”, que traducido dice algo así como: “Donde miramos afecta a cómo sentimos” En efecto, la técnica busca la posición ocular, una determinada colocación de los ojos en la que la persona conecta con un determinado sentir y/o una determinada experiencia vivida.
Durante el curso hubo algo que nos contó David que me hizo reflexionar: Describía una sesión en la que el paciente, cada vez que hablaba de un problema concreto, dejaba de mirar al terapeuta y se iba con los ojos a mirar a un punto de la pared. Hasta aquí todo en orden, pues es parte de lo que pasa en una sesión de BSP; a partir de ahí trabajas con el paciente. Lo que me tocó fue algo que pasó dentro de mí. Hasta ahora, el terapeuta busca la mirada del paciente y, si este mira hacia otro lado, se puede interpretar como que rehúye la mirada, tiene miedo a enfrentarse, hay algo oculto, …. Nos decían nuestros maestros. Pues no señor, la persona mira hacia un punto y no necesariamente está evitando mirar hacia algún lado. Os invito a reflexionar sobre esto. Buscad a dónde mira vuestro paciente, acompañadle en esa mirada y dejad que desde ella se muestre y exprese, que le surjan sus emociones, pensamientos, escenas, y veréis que riqueza os presenta. A lo mejor descubrís tesoros ocultos en una historia conocida.
Espero que os guste el BONDING de este mes y lo difundáis entre vuestros amigos y colegas.
Un abrazo para tod@s,
José Zurita
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